La seguridad absoluta no existe. Ninguna organización está libre de sufrir un ataque informático, ser víctima de un desastre natural o de una interrupción de los servicios. Por eso, no basta con prevenir riesgos. La clave reside en fomentar ciberresiliencia, entendida como la capacidad para identificar, responder y recuperarse rápidamente de un incidente, minimizando los daños en los datos, servicios y sistemas.
Aunque en ocasiones no sea tenida en cuenta, la computación en la nube es una herramienta fundamental para construir empresas ciberresilientes y promover la continuidad digital.
Te invitamos a descubrir de qué maneras el cloud computing contribuye a la ciberresiliencia organizacional.
Ciberresiliencia, un aspecto crucial, pero a menudo subestimado
A diferencia de la ciberseguridad —que tiene como objetivo impedir el acceso no autorizado a un sistema o red de una compañía, poniendo en marcha medidas específicas de seguridad IT, como cifrado, autenticación y firewalls, entre otros—, la resiliencia cibernética se centra en reducir el impacto de un incidente, procurando mantener activos los sistemas mínimos necesarios durante y después de que ocurra.
En este sentido, podemos definir a la ciberresiliencia como la capacidad que tiene una organización para estar preparada, responder y retomar sus operaciones ante una amenaza, desastre o cualquier situación que cause la interrupción de sus servicios, procurando tener el menor daño posible.
La sofisticación de las amenazas cibernéticas y la imprevisibilidad que presenta la ocurrencia de escenarios adversos —problemas climáticos, caídas del suministro eléctrico, etc.— hacen que la resiliencia cibernética sea una parte vital en la estrategia de seguridad.
Cuando son ciberresilientes, las organizaciones no solo pueden recuperarse rápidamente y volver a estar operativas tras situaciones complejas, sino que también evitan pérdidas financieras y protegen su reputación ante los clientes, partners y colaboradores.
A pesar de su evidente relevancia, la resiliencia cibernética es a menudo un componente infravalorado.
Esto se debe a una serie de factores, entre los que destacan:
- Desconocimiento de sus características e importancia. Muchas empresas se concentran en las precauciones de ciberseguridad —sintiéndose seguras y protegidas—, pero dejan de lado las medidas apuntadas a mejorar la ciberresiliencia.
- Falta de comprensión de las diferencias entre ciberresiliencia y ciberseguridad. Algunas organizaciones no terminan de distinguir un concepto de otro, y por eso no le dan a la resiliencia cibernética la importancia que merece en su plan de IT security.
- Predominio de la ciberseguridad en el discurso de la seguridad. El énfasis que se le da a la seguridad cibernética en los planes de protección IT a menudo hace que se infravalore la ciberresiliencia.
Cómo la nube ayuda a crear empresas ciberresilientes
Además de proporcionar agilidad, escalabilidad y un entorno seguro para ubicar diferentes cargas de trabajo, la computación en nube se presenta como una valiosa herramienta para potenciar la ciberresiliencia y la continuidad digital. Ocupa este lugar por diferentes motivos.
En primer lugar, su capacidad de hacer failover que va más allá de la ubicación geográfica, protege a los servicios cruciales de las consecuencias de una crisis derivada de un desastre natural, un fallo de una infraestructura crítica o un ataque de ransomware.
Además, el cloud computing proporciona altos niveles de potencia informática bajo demanda, permitiendo que las organizaciones utilicen estos servicios como conmutación por error para sus propios sistemas, en los casos en los que sea necesario.
De hecho, la naturaleza escalable de la computación en la nube hace que sus servicios sean menos proclives a fallar, incluso en situaciones de alta demanda o requisitos elevados de uso. Esto es especialmente importante cuando se produce una crisis, ya que en esas ocasiones los requerimientos de las organizaciones suelen aumentar.
Además, los proveedores cloud hacen especial hincapié en la confianza, ya que saben que se trata de un aspecto crucial para su modelo de negocio.
En consecuencia, basándose en el supuesto de que “todo puede salir mal”, desarrollan prácticas robustas de ciberseguridad en la nube que apuntan a mantener un control estricto del entorno.
Ciberseguridad y resiliencia, dos aspectos prioritarios para Nubax
Para nosotros, proteger los sistemas, las aplicaciones y los datos de nuestros clientes es fundamental.
Por eso, desarrollamos una Política de Ciberseguridad y Resiliencia que resguarda la integridad, disponibilidad, confidencialidad y resiliencia de los registros.
¿Cómo garantizamos la seguridad y la resiliencia cibernética? Gracias a la implementación de un sistema de gestión que permite administrar la ciberseguridad, tomando como base una serie de principios básicos:
- Establecer un marco de control adecuado que permita medir el nivel de riesgo y definir las medidas de tratamiento oportunas
- Promover la definición de roles y responsabilidades en materia de seguridad y resiliencia IT
- Proporcionar los recursos necesarios para garantizar una gestión adecuada de la ciberseguridad y la ciberresiliencia
- Garantizar las skills de los colaboradores a través del desarrollo de planes de entrenamiento en ciberseguridad
- Establecer un proceso de mejora continua aplicable a este sistema de gestión
- Considerar los requerimientos de ciberseguridad de los clientes
En Nubax, la ciberresiliencia es prioridad. Si querés saber más sobre cómo el cloud computing ayuda a que las empresas sean más ciberresilientes, mandanos un mensaje.